La Sombra de una Doctrina Centenaria: El Renacer de la Intervención en América Latina

Expertos consultados señalan que, lejos de ser una reliquia histórica, el concepto ha sido revitalizado. La retórica actual, enmarcada en una lucha global por la influencia, presenta a la región como un “patio trasero” en disputa, donde otras potencias como China y Rusia son vistas como actores foráneos cuya presencia es ilegítima. Esta perspectiva, argumentan los analistas, reaviva el espíritu unilateral de la Doctrina Monroe, adaptándolo a los conflictos del siglo XXI.

La instrumentación de este resurgimiento sería multifacética. Se observa en la imposición de sanciones económicas a países que desafían el alineamiento con Washington, en el condicionamiento de la ayuda financiera y en una creciente militarización, con una expansión de la presencia de bases y operaciones militares estadounidenses en territorios clave. Para muchos gobiernos de la región, estas acciones constituyen una clara violación de su soberanía y de los principios de no intervención.

La respuesta latinoamericana no se ha hecho esperar. Bloquees regionales y naciones de forma individual han alzado su voz para rechazar lo que perciben como un retorno a las prácticas intervencionistas. Denuncian que, bajo el disfraz de la promoción de la democracia o la seguridad, se esconde un intento de socavar su derecho a la autodeterminación y a forjar alianzas internacionales libres de coerción.

Este resurgimiento de la Doctrina Monroe, concluyen los observadores, no hace sino tensar las relaciones hemisféricas y plantea una pregunta crucial para el futuro: ¿está América Latina condenada a ser de nuevo el tablero donde se juegan las grandes rivalidades globales, o logrará la región consolidar una voz propia e independiente en el escenario internacional? El debate sobre el “Águila” y su sombra sobre el continente está más vigente que nunca.

La Sombra de una Doctrina Centenaria: El Renacer de la Intervención en América Latina

Un principio geopolítico del siglo XIX, la Doctrina Monroe, parece estar experimentando un vigoroso renacimiento en la política exterior contemporánea, según apuntan analistas internacionales. Bajo el lema “América para los americanos”, esta doctrina, que durante doscientos años justificó la hegemonía estadounidense en el hemisferio, está recuperando un lugar protagónico en la estrategia de Washington.